12 sept 2008

Una tenda i dos bars nazis, segellats i pintats per antifeixistes a 10 mesos de l'assassinat de Carlos Palomino

Según ha revindicado Madrid Antifascista, la tienda Rivendel y los bares "Drakkar" y "La Cantina" fueron sellados y pintados porque "promueven la ideología fascista y la financian con sus negocios".

La tienda de ropa "Rivendel Madrid Streetwear", situada en la calle Fernándo el Católico 61, recibió el sellado de sus cerraduras y pintadas de "tienda nazi" y "asesinos".

Por su parte el Bar Drakkar, que se encuentra en la calle Marceliano Santamaría, también sufrió el sellado de los cierres y cerraduras, así como pintadas de "Bar nazi" y "Carlos presente, ni olvido ni perdón". Además, los antifascistas arrojaron pintura roja por todo el suelo junto a la entrada, por los cierres y el rótulo del bar.

También el Bar La Cantina, de Fuenlabrada, fue sellado en homenaje a Carlos.

FOTOS:

Tienda Rivendel

Bar Drakkar

Bar La Cantina

COMUNICADO:

Hoy 11 de Septiembre de 2008, cuando se cumplen 10 de meses del asesinato de Carlos a manos de un militar neonazi en el metro de Legazpi, queremos recordar a nuestro compañero sellando las tiendas y bares de
aquellos que promueven la ideología fascista y la financian con sus negocios.

Negocios como la tienda Rivendel, situada en la calle Fernando el Católico 61, en apariencia un establecimiento de ropa deportiva pero que con la venta de marcas nazis como Thor Steinar o Three Stroke, fomentan el odio racial y el fascismo.

Thor Steinar, es una marca neonazi alemana cuyo logotipo está inspirado en el símbolo de las SS y que tuvo que ser modificado en el año 2004 tras una sentencia del Tribunal de Berlín por considerarlo anticonstitucional.

Three Stroke era la marca de la sudadera que Josué Estébanez de la Hija, llevaba el 11 de Noviembre cuando apuñaló mortalmente a Carlos.

Los derechos de distribución de esta marca en nuestro país, están registrados a nombre de dos antiguos dirigentes de la organización neonazi Bases Autónomas: Carlos Rodrigo Ruiz de Castro, dueño de la tienda paramilitar Soldiers, y Pedro Fernando Fernández Perdices, dueño de la tienda neonazi DSO, situada en pleno centro de Madrid y donde se vende material de corte fascista.

Pero tampoco hemos pasado por alto sus lugares de reunión en Madrid, bares como Drakkar ubicado en las inmediaciones del estadio Santiago Bernabéu, lugar donde Ultras Sur aprovecha a hacer caja difundiendo el racismo entre los jóvenes utilizando el fútbol como excusa y modo de captación. O bares como La Cantina en Fuenlabrada, bar frecuentado por jóvenes de extrema derecha, entre ellos Josué Estébanez de la Hija, asesino de Carlos.

Desde Madrid Antifascista sabemos que los fascistas intentan camuflarse con marcas aparentemente deportivas y sin ninguna filiación política, que resulta más discreta debido al acoso al que se están viendo sometidos por la sociedad.

Nosotros, con está acción, no sólo recordamos a Carlos, además les señalamos, les desenmascaramos y les advertimos de que sus negocios fascistas no tienen cabida en nuestra ciudad.

EL MEJOR HOMENAJE CONTINUAR LA LUCHA

(la haine)

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