Los promotores de la protesta aseguran que el número de reclusos preventivos que se ha sumado a ella supera los 200, frente a los cincuenta de los que hablan los sindicatos de prisiones. |
Los internos sostienen que durante el primer día de huelga se les amenazó con darles de baja de sus trabajos en la cárcel. Los presos preventivos de Tenerife II entraron ayer en su segunda jornada en huelga de hambre, cuyo alcance resulta difícil de precisar debido a las diferencias de las cifras que aportan los sindicatos de prisiones y los organizadores de la protesta. Así, según el representante de la sección sindical del CSI-CSIF, Bernardo Fernández, de los algo más de 92 reclusos que iniciaron la huelga, a mediodía de ayer sólo cincuenta -35 hombres y 15 mujeres- mantenían el ayuno. Por el contrario, fuentes de los internos aseguraban que, a la misma hora, 226 personas permanecían sin comer. Mientras, otras fuentes de los trabajadores indicaban que la cifra de huelguistas rondaba los cien. Además, los presos -que dirigen esta actuación contra el "exceso" de órdenes de prisión preventiva que se dictan en Canarias- denunciaron ayer "intimidaciones" durante el primer día de huelga por parte de algunos funcionarios, un extremo contundentemente desmentido por Fernández, quien calificó estas presuntas presiones de "inexistentes". Según un comunicado emitido por los huelguistas , las intimidaciones consistieron en "amenazas a reclusos que ya cuentan con destinos laborales dentro de la cárcel con darles de baja si se unen a la huelga". Asimismo, los presos sostienen que también se les ha coaccionado con efectuarles registros en busca de restos de comida en las celdas para, "inexplicablemente, abrir partes disciplinarios". Respecto a estos registros, el representante del CSI-CSIF explicó que es habitual comprobar que los huelguistas están manteniendo el ayuno, para garantizar que los recursos -principalmente sanitarios- que se les destinan están justificados. Según los promotores de la huelga, su objetivo ha sido llamar la atención sobre la "situación de zozobra" que vive el colectivo de reclusos preventivos "por la ineptitud y lentitud de los funcionarios públicos que contribuyen a estancar los procesos judiciales y ocasionan un efecto dominó de destrucción de centenares de familias". En este sentido, creen "irresponsable" que se fije un tiempo máximo de cuatro años "para estudiar y tomar una decisión sobre un sumario que, en algunos casos, tiene poco más de veinte hojas". "Nuestra protesta -prosigue el manifiesto redactado por los internos- busca una sensibilidad responsable de lo que significa ser un empleado al servicio de miles de ciudadanos. No pedimos que condonen nuestras causas, sólo que hagan el trabajo a tiempo, porque aquí nos estamos muriendo día a día", dicen los presos, que piden que se permita a sus abogados "litigar de una manera limpia y transparente". En cuanto al seguimiento de la protesta, sus organizadores detallan que, en el día de ayer, era secundada por 75 internos del módulo 2, 68 del 3, 49 del 1 y 34 internas del módulo de mujer. Además, otras fuentes consultadas por este periódico señalaban que algunos reclusos del módulo siete -los más jóvenes del centro penitenciario tinerfeño- se habían unido a la iniciativa. ______________ VIDAS TRUNCADAS Distintos profesionales de la abogacía consultados relatan historias de personas con vidas truncadas por una decisión judicial de mandarlos a prisión de manera preventiva. La abogada Alicia Mújica cuenta el caso de un hombre de origen marroquí que fue detenido por una supuesta estafa. "Tenía permiso de residencia y trabajaba en Mercatenerife. Como pasó este tiempo en la cárcel, al salir ya se le había caducado el permiso, había perdido su piso y trabajo y, claro, se convirtió en ilegal pese a que en el juicio se demostró su inocencia. Todo por un error", explica y comenta que "si no hubiera estado preventivo, su vida hubiera transcurrido con normalidad hasta el juicio". La abogada achaca parte del problema a la saturación de los órganos judiciales y a la falta de medios. Antonio Naranjo también es abogado penalista y afirma de forma rotunda que "en Canarias hay un exceso en el uso de la prisión preventiva". Achaca el hecho a que no hay una normativa nacional clara donde se determine en qué casos debe establecerse esta medica y a que "queda en manos de los jueces". Él también narra casos de víctimas de este, a su juicio, exceso. Como el de una persona que pasó dos años en prisión por un supuesto tráfico de drogas y que también fue absuelto en el juicio. Ya nadie le podrá devolver estos dos años de su vida y las consecuencias sociales que le pueden acarrear. Algo similar le ocurrió a una joven madre que se vio envuelta en otro problema de tráfico de drogas de su pareja y que también perdió su permiso de residencia para extranjeros. El abogado Manuel García de Mesa también coincide con los anteriores de que hay un exceso de preventivos y ejemplifica esta situación en que "cada día tengo que interponer múltiples recursos" e insiste en que "la Ley debe garantizar un juicio justo y lo más rápido posible". Por ello, entiende que los presos preventivos se desesperen pero aconseja a sus clientes que "no sigan la huelga de hambre pues no van a lograr su objetivo y, para continuarla, tendrán que desobedecer a los funcionarios con lo que se les abrirá expedientes que les pueden perjudicar en los juicios". Mas info en La Haine |
21 sept 2008
Els presos de Tenerife II en vaga de fam denuncien intimidacions
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