19 feb 2009

La revuelta continúa en el Caribe francés

El líder de la huelga general que está asediando Guadalupe ha acusado al Gobierno francés de estar planeando asesinar manifestantes para poner fin a las huelgas en esta isla del Caribe francés.

Actualizado (en inglés) AQUÍ

    “Hoy, teniendo en cuenta el número de gendarmes que han llegado a Guadalupe armados hasta los dientes, el Gobierno francés ha escogido su táctica habitual: matar a los Guadalupeños como siempre”, decía Elie Domota el sábado.

    Domota es el líder del colectivo contra la explotación (LKP), que agrupa a la mayoría de los sindicatos y partidos políticos que promovieron la huelga general el 20 de enero contra los bajos salarios y el alto coste de vida.

    El LKP es un colectivo que une a 48 asociaciones culturales y sociales, grupos de la izquierda nacionalista y sindicatos, dominados por el UGTG (General Union of Guadeloupe Workers). El UGTG fue el resultado del auge del nacionalismo tras la brutal represión de 1967 al movimiento popular que reivindicaba el incremento salarial. La huelga estaba liderada por trabajadores de la construcción. En ella, 80 personas fueron asesinadas por la policía francesa. Se ha convertido en el sindicato mayoritario de Guadalupe, recibiendo el 52 % de los votos en las elecciones de representantes para los tribunales de industria en 2008.

    La acusación de Domota se basa en que algunos supermercados y gasolineras, que llevaban cerrados más de tres semanas, abrieron mientras la policía los protegía ante los posibles manifestantes, piquetes y huelguistas de la isla tropical.

    “Cada vez que ha habido manifestaciones en Guadalupe para demandar un incremento salarial la respuesta estatal ha sido la represión. Hay que remarcar el centenar de manifestantes (mayoritariamente trabajadores de la construcción) masacrados por la gendarmería en Pointe-a-Pitre en mayo de 1967”, dice Domota.

    El sábado miles de trabajadores marcharon por toda la ciudad de Le Moule gritando “Guadalupe es nuestra, no de ellos”. Se referían a los “Bekes”, la minoría blanca que posee el poder económico de una isla donde la mayoría del medio millón de residentes son descendientes de esclavos africanos.

    Christiane Taubira, un diplomático francés del departamento de ultramar en América del Sur, advirtió el domingo que la situación en Guadalupe estaba “muy lejos del apartheid social”.

    Dijo en una entrevista que “los líderes del LKP no eran racistas anti-blancos. Están exponiendo una realidad […] donde una casta controla el poder económico y abusa de él.”

    La mayoría de tiendas, cafés, bancos, colegios y oficinas gubernamentales han permanecido cerrados en Guadalupe desde el comienzo de la huelga. Una masiva manifestación de 25.000 personas (la población total es de 410.000 personas) tomó las calles el 24 de enero en la capital Pointe-à-Pitre. El 30 de enero, 65.000 personas se manifestaron de nuevo en Pointe-à-Pitre. El gobierno ha respondido al llamamiento con la negativa al incremento del salario base en 200 euros.

    Mientras tanto, la vecina isla francesa de Martinica comenzó su propia huelga general hace más de una semana. Doce sindicatos hicieron un llamamiento a la huelga general el 5 de febrero contra el detrimento del poder adquisitivo, que especialmente ha afectado a 70.000 personas en la isla dejándolas bajo el umbral de pobreza. El 9 de febrero 25.000 personas se manifestaron en la capital, Fort-de-France. La población de la isla Martinica es de 401.000 habitantes.

    Extraído de Libcom

No hay comentarios:

Publicar un comentario