10 feb 2009

La huelga continúa y se extiende a Martinica

El cierre de las estaciones de gasolina han provocado escasez de carburante en Guadalupe.Foto: AFP

La isla francesa de Martinica se dejó ganar el jueves por la huelga que se inició el 20 de enero pasado en la vecina Guadalupe para protestar contra la carestía de la vida. Entre 15.000 y 20.000 manifestantes salieron a las calles en Fort-de-France.

El llamado a la huelga general lo hicieron 12 sindicatos martiniqueño para protestar contra los altos costos de la vida, la precariedad del empleo y para reclamar una revalorización de los salarios.

El jueves en la capital, Fort-de-France, el transporte público estaba completamente paralizado y las cortinas metálicas de los comercios se mantuvieron cerradas durante el desfile que se llevó a cabo en un ambiente de carnaval y sin incidentes. Entre 15.000 y 20.000 manifestantes salieron a las calles de Fort-de-France.

Martinica se unió así a la huelga general que paraliza a la vecina isla de Guadalupe desde el pasado 20 de enero. El secretario de Estado para Ultramar, Yves Jégo, quien viajó a la capital guadalupeña, Pointe-à-Pitre, aseguró haber obtenido un acuerdo con la patronal para abrir negociaciones sobre la base de un aumento “de al menos 2%” de los salarios.

Luego de dos semanas de huelga, tiendas, escuelas, gasolineras y transportes públicos de Guadalupe se mantenían cerrados, lo que ha provocado escasez de alimentos y carburantes. Un centenar de asociaciones, partidos y sindicatos locales, reunidos en el “Comité contra la explotación excesiva” (LKP, por su siglas en lengua criolla), iniciaron la protesta para exigir al gobierno de Nicolas Sarkozy una rebaja de impuestos, el aumento de salarios y recorte de los precios de la gasolina.

El viernes, el acceso al único depósito petrolero de Guadalupe, fue bloqueado al tiempo que los sindicatos del puerto entregaron sus propias reivindicaciones.

Jégo debe reunirse este viernes por la tarde con los dirigentes de la refinería que ejerce un monopolio para el aprovisionamiento de carburante de las Antillas, cuyo accionario mayoritario es la empresa francesa Total. El responsable de los territorios de ultramar deberá analizar en esta reunión una baja del precio de los carburantes, luego de la reducción de 30 céntimos aprobada en diciembre.

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