«Ni censura ni injerencia. Bibliotekak denontzat». Esta es la frase que los bibliotecarios formaron a las 12.00 de ayer en la Plaza del Ayuntamiento de Iruñea con grandes letras pegadas en diversos periódicos. De esta forma tan gráfica mostraron su rechazo al veto impuesto por UPN a GARA y «Berria» en las ocho bibliotecas públicas de la capital navarra y en la de Barañain. En coherencia con ese veto, los responsables de las bibliotecas de Iruñea siguen sin suministrar ningún periódico a sus visitantes.
Durante la protesta de ayer, que estuvo vigilada por la Policía española, la presidenta de la Asociación Navarra de Bibliotecarios, Asun Maestro, explicó los motivos que les habían llevado a realizar una movilización en una fecha tan emblemática como el Día del Libro. «Más que celebraciones, queremos plantear reflexiones, porque los episodios de censura e injerencia en estas bibliotecas están suponiendo un ataque profesional al libre ejercicio en nuestro deber y al espíritu de la biblioteca pública», afirmó la presidenta de ASNABI.
«Nunca había conocido esto»
Tras dar lectura, en euskara y castellano, al manifiesto a favor de la biblioteca pública suscrito por más de 400 personas y 18 asociaciones profesionales, Asun Maestro expresó a GARA que el objetivo del acto era reclamar que «sean restaurados el respeto a nuestra profesión y la libertad de información de los ciudadanos».
También expresó el deseo de los bibliotecarios de que «se supere esta situación y nunca más vuelva a producirse». Maestro recordó que lleva 25 años trabajando como bibliotecaria y que «nunca» había conocido un caso como éste.
«La historia de las bibliotecas de Navarra tiene 60 años, y nunca había ocurrido algo así, ni siquiera en momentos en que no existían formalmente la libertad y la democracia. Desde el comienzo de las bibliotecas públicas -añadió- siempre se ha respetado que la formación de la colección, que es un poco el corazón de nuestro trabajo, la hagan los bibliotecarios. Así ha constado en documentos y en convenios, y así ha sido defendido por todos los responsables que ha tenido la red de bibliotecas públicas».
La presidenta de ASNABI se mostró satisfecha por la respuesta que están dando la inmensa mayoría de los bibliotecarios navarros. «Queremos demostrar que somos coherentes y consecuentes con nuestra profesión. Defendemos la lectura y la libertad de expresión, y nos parece que esto es un ataque lo suficientemente grave como para estar ahora y aquí, en nuestro tiempo libre, defendiendo esa libertad».
Preguntada sobre la postura que adoptarían los bibliotecarios si UPN llega a consumar su veto o a plasmarlo en un documento público, Asun Maestro anunció que ASNABI está dispuesta a recurrir a organismos internacionales.
A su juicio, este veto supone que «se está vulnerando totalmente el espíritu de la Ley de Bibliotecas vigente en Navarra».
Por su parte, la concejala Mariné Pueyo, que participó tambbién en esta concentración, declaró que la actitud mostrada por UPN es «antidemocrática y supone una censura inadmisible en un sistema que se dice democrático».
«Vamos a hacer todo lo posible por que se revoque esa decisión. Si no es así, Barcina tendrá que asumir las consecuencias de una actuación que consideramos totalmente dictatorial y fascista», agregó Pueyo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario