Tras un largo asedio policial, Rompamos el Silencio abre la sede de la Semana de Lucha Social 09
Okupados los Cines Luna en Madrid
Domingo 28 de junio de 2009
Como en años anteriores, en estas fechas arranca la Semana de Lucha Social de Rompamos el Silencio, una semana de acciones directas y charlas, esta vez bajo el lema «¡Somos vuestra crisis!», ya que se pretende evidenciar los efectos de la crisis económica que nos asola. Ése es también el lema que han adoptado las protestas contra la cumbre del G8 que se celebrará en Lecce (Italia) a partir del 4 de julio.
Un años más, la Semana de Lucha ha comenzado con la okupación de un céntrico edificio de la ciudad de Madrid: los Cines Luna, en la Plaza Santa María Soledad Torres Acosta, que serán su sede temporal durante la semana. Una vez más, se trata de un cine que lleva años abandonado (como en la edición de 2006, con los cines Bogart), solo que esta vez en un barrio casi por entero comprado por Triball, en consonancia con su plan de convertirlo en una discoteca, hecho que ha suscitado numerosas protestas vecinales. El edificio okupado es propiedad del Banco Espirito Santo, uno de los bancos más importantes de Portugal, dos veces investigado por blanqueo de capitales y uno de los depósitos donde Pinochet trató de ocultar parte de su fortuna personal.
Pasadas las 16h del sábado día 27 de julio, un centenar de activistas han conseguido entrar en los Cines Luna, a pesar del impresionante despliegue policial que había esa mañana en Madrid con motivo de la inauguración de la estación de metro de Sol.
Fuera, en la plaza, permaneció, durante tdda la tarde, el grupo de apoyo, desplegando pancartas alrededor del edificio, con los lemas: «Liberando espacios de la especulación», «Rompamos el Silencio 2009», “Somos vuestra crisis”, y distribuyendo los panfletos con el comunicado emitido por el eje de okupación del RES.
La policía no tardó en llegar y rodear el edificio: 20 antidisturbios se posicionaron ante las puertas principal y secundaria, y unos seis furgones y varios coches de policía entraron en la céntrica plaza. Comienzaron entonces a pedir la documentación al grupo de apoyo, y terminaron identificando prácticamente a todos los activistas situados frente a los Cines Luna. Insistieron también en que se retiraran las pancartas. La incertidumbre, la actitud de la policía (que, por ejemplo, se dirigió a un grupo de obreros con la intención de determinar si es posible la apertura de un acceso al edificio; que intentó incluso, pese a tratarse de un acto ilegal, entrar en el edificio dándole una patada a la puerta; o que se quejaba del calor y del horario, «hora de la siesta», y de la inoportunidad del momento porque «mañana juega España».) y los movimientos de las lecheras (que se acercaban cada vez más a la entrada del edificio y cortaban los accesos a la plaza) hizo que durante las primeras horas la situación fue algo tensa.
Dentro, el grupo comenzó a recorrer el interior del edificio, a revisar los espacios (entre ellos la sala de butacas, el patio y la azotea, donde desplegarán de nuevo las pancartas anteriores), a fortalecer los acceso, etc. El edificio de los cines Luna, abandonado desde el 31 de julio de 2005, presenta un estado estructural bueno, pero con mucha suciedad debido a los años de abandono. El edificio cuenta con una sala de butacas, un patio, y una azotea desde donde los activistas tiraron aviones de papel y colgaron pancartas con diferentes lemas.
Una hora después de la okupación, apareció en el lugar el conserje del edificio con las llaves, intentado abrir la puerta. Sin conseguirlo, comienzó a hablar con los activistas y con la policía, que le sugiere que ponga una denuncia. Mientras, el grupo de apoyo siguió en la puerta principal, mientras dos activistas continuaron portando una pancarta ante la puerta secundaria (el resto tuvo que retirarse por insistencia policial, uniéndose al grupo de la plaza). Los que estaban situados en la puerta secundaria se unieron al grupo de la plaza.
En las horas siguientes, continuó el movimiento de los furgones policiales: llegaron más, se fueron otros, comenzaron los relevos, y apareció más policía municipal. También comenzaron a trasladar vallas de obra y a cercar con ellas al grupo de apoyo que había en la plaza. Esta situación se mantendrá durante cuatro horas más, en las que la policía se mantiene en la puerta, en espera de órdenes, y decenas de activistas permanecen en la plaza, en espera de movimientos de la policía. Son momentos de calma tensa en el centro de la ciudad.
No será hasta las diez de la noche, tras seis horas de asedio policial, cuando los antidisturbios comienzan a retirarse de la nueva sede de la Semana de Lucha Social. Queda inaugurado el nuevo centro de convergencia!!!
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